Los medios estatales rusos informan que Bashar al-Assad llegó con su familia a Rusia, donde se les ha brindado asilo, según la agencia RIA Novosti, citando fuentes del Kremlin. Bashar al-Assad asumió el poder en el año 2000, y su padre gobernó Siria durante 30 años.
Siria ha vivido una guerra civil desde 2011, la cual comenzó como una protesta pacífica. Las cifras de fallecidos alcanzan el medio millón, y 12 millones de personas han abandonado sus hogares y buscado refugio en diversas partes del mundo.
El presidente de Estados Unidos Joe Biden dice que la caída de Assad es un «acto fundamental de justicia» para el pueblo sirio.
Las fuerzas rebeldes sirias lograron acceder a más celdas en la infame prisión de Saydnaya el pasado domingo, liberando a numerosos prisioneros que sufrían condiciones inhumanas tras tomar el control de Damasco y derrocar al régimen de Assad.
En un video difundido en internet por Al Jazeera, se observa a las fuerzas rebeldes derribando paredes con mazos, tras descubrir celdas que parecían estar ocultas. Las imágenes muestran a cientos de hombres saliendo de la prisión, que estaba peligrosamente superpoblada.